Resumen:
Cada año que pasa, existen más personas que han contraído el Virus de Inmudeficiencia adquirida (VIH) en todo el mundo. Según la organización mundial de la salud (OMS), en el año 2013, 35 millones de personas vivían con el virus, 2,1 millones de personas fueron infectadas durante ese año, y fallecieron 1,5 millones1. En Chile, donde se estima que 32.000 personas viven con el virus, la principal vía de transmisión del VIH es entre
hombres que tienen prácticas sexuales con otros hombres (HPSH)2. Esta población se
caracteriza por ser de difícil acceso, lo cual dificulta estimar la prevalencia de VIH y otras
infecciones de transmisión sexual (ITS) dentro de este grupo, así como también conocer
sus características y diversos aspectos relacionados al riesgo de adquisición y transmisión del virus y, con ello, la implementación de medidas preventivas focalizadas. Es así que para conocer las conductas, los aspectos sociodemográficos y clínico-epidemiológicos que influyen en la transmisión del VIH en este grupo, es necesario recurrir a los sistemas de vigilancia de segunda generación (VSG)3. Los estudios bioconductuales son parte de la VSG y utilizan metodologías de reclutamientos especiales como lo es el método Respondent Driven Sampling (RDS).